Preparando
que hacer en mi semana especial de junio, encontré muchas
posibilidades. Existen diferentes travesías que discurren por todos
los pirineos. Pero me centre en esta, la Senda de Camille. Tal vez me
cautivó su nombre, o que trascurre por el Pirineo Aragonés y
Francés, o simplemente por el encanto de pernoctar en sus refugios.
Lo cierto es que Camille paso a ser mi destino, mi fijación y mi
plan. Y cuando mis brujillas decidieron unirse conmigo a esta
aventura, paso a ser mi sueño.
Saliendo
un poco de mis ensoñaciones, paso a describir a grandes rasgos e
indicaciones la preparación de pre-senda.
Puedes
organizarlo por tu cuenta, reservando cada uno de los refugios
personalmente. Pero nosotras nos dejamos en manos la
empresa Val d´Echo Activa.
Y fue un éxito la elección.
Lo
primero es decidir que variante vas a elegir y después el orden de
las etapas. La senda consta de 6 o 7 etapas, según si incluyes Oza.
En total mas de 100 kilometros y 8000 metros de desnivel acumulado.
En
la variante de seis etapas puedes elegir el refugio de inicio. Solo
Arlet no dispone de acceso de vehículos.
La
tabla superior es nuestra decisión. Contactando con el portal,
indicamos nuestro orden y realizamos el pago de la prereserva. Todo
ya va en marcha. Diez días antes del inicio, se realiza el ingreso
del resto y ya esta.
Toda
la organización por parte de la empresa ha sido muy correcta. Se nos
indico horarios de refugios, pequeños consejos para la senda,
incluso se nos orientó al respecto de las coberturas móvil.
Como
regalo por la inscripción recibimos, al presentarnos en el primer
refugio, un porta-mapas con mapa y libro-guía, un saco-sabana y una
tarjeta para el sellar en cada uno de los refugios. Al final, una vez
completada, en el último te entregan una camiseta exclusiva de la
Senda.
Os
podemos asegurar que tanto el libro-guía como el mapa sirven de
mucho en esta travesía, eso si, no olvidarse de bajarse los track al
gps, al fin al cabo, andamos por el Pirineo, ademas la niebla puede
hacer su aparición y ante esto no hay mapa que valga.
Respecto
al saco-sabana, aparte de ser muy “amoroso” es más que
suficiente ya que en todos los refugios disponen de mantas. Nosotras
tuvimos mucha suerte con el tiempo y la temperatura nocturna no hizo
necesitar mas abrazo que el del saco.
Ya
con una sonrisa en el rostro, y en la mente la idea de pasar seis
días en un entorno privilegiado y una compañía única (eso si, el
cuarteto no estaba completo, nos faltaba una brujilla que no pudo
unirse) toca prepararse para esta aventura.
Preparación
física, mochila y sobre todo, mimar y preparar a los protagonistas
de la Senda, nuestros pies.
Más
o menos seguí las mismas indicaciones que para el Camino de
Santiago. Aquí lo único que tienes que añadir es la comida. En los
refugios teníamos contratado desayuno y cena, por lo que tenemos que
llevar en la mochila algo para renovar fuerzas. En Aysa, Somport
tienen tienda, algo se puede reponer, en el camino hay alguna cabaña
de venta de queso, y en Lescún, pueblo de Francia donde pernoctamos
hay comercios, con hora de cierre a las 19,30hs. No obstante,
nosotras llevamos suficiente para cada día, para así evitar
sorpresas como la de Lescún, que llegamos en el día de cierre
semanal. A la mochila barritas, frutos secos, snack de longanicetas y
un surtido de frutos secos. Para el agua, para dos litros más o
menos. Te encuentras fuentes en los senderos, pero, no hay que fiarse
además cuando el calor aprieta.
Os
recomiendo esta experiencia. Realmente única, pasar seis días
rodeada de naturaleza, bellísimos paisajes y viviendo cada momento
de la jornada. Eso sí, hace falta estar preparado, no es un paseo,
sino que conlleva un fuerte desgaste por que los kilómetros diarios
y el desnivel es bastante importante. Pero hay horas suficientes en
el día para que chino-chano, se pueda hacer sin que sea un
sufrimiento. Por que hemos venido a disfrutar.
Añadimos
al entorno el trato fenomenal que hemos recibido en cada refugio, la
compañía que te ha arropado desde el día de partida, la gente que
conoces que comparte senda contigo y de todo esto solo sale un
resultado: Una felicidad inmensa que durara por mucho tiempo.
No
vimos a Camille, pero si vimos en nuestros rostros el disfrute del
momento. Y conocimos gente maravillosa, de la que costo mucho
despedirse. Gracias a esas tres pelirrojas guapas, divertidas y
sonrientes por compartir senda con estas tres yayas. Nunca olvidaré
vuestros nombres porque ...con lo que me costo aprenderlos….
Gracias parejita, erais todo amor y vimos en vosotros el espíritu
del buen montañero. Con vosotros cinco, Maider, Olatz, Esther, Lucía
y Pablo, la senda paso a ser un momento único e inolvidable. Y a
vosotras dos, Belén y Marian, daros las gracias por acompañarme en
este sueño. Y no quiero olvidar a Pili, nuestra cuarta brujilla que
no pudo estar, pero que nos acompaño en nuestros corazones.
En
esta entrada, poco más. Solo espero que si alguien tenia en su
cabeza la Senda, pronto pase a ser parte de su corazón.
Unos
enlaces de interés.
PAGINA OFICIAL DE LA SENDA DE CAMILLE
Mas información y buena de la Senda
Mis consejos para mochila (de Santiago a Camille, adaptar)
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