Bal
de Chistau
Un
fin de semana en una zona maravillosa, llena de rincones y con un
entorno espectacular. Haciendo noche en un camping de Saravillo, nos
dedicamos a pasear sin prisa y sin mirar el reloj.
En
uno de estos paseos realizamos una ruta sencilla, para poder charlar,
reír y pararnos a contemplar y respirar.
Puente
Pecadores - Puente del Molino
Desde
Saravillo, nos dirigimos a Gistaín, pero antes de llegar, una vez
pasado San Juan, encontramos el parking junto al puente de los
Pecadores. Allí estacionamos y empezamos el paseo.
Dicen
que el lugar se llama así por que arrojaban desde allí a los
pecadores y condenados. Una forma rápida de impartir justicia, en
fin.
Ruta
perfectamente señalizada y sin perdida. Comenzaremos por una pista
que en unos metros nos conducirá al primer puente, donde ya
entraremos en senda, con paneles informativos , y con marcas blancas
y amarillas e indicaciones a “Puen del Molin”.
Entre
bosque llegaremos a un alto, donde un mirador natural nos permitirá
contemplar parte del valle. Un tramo después, comenzaremos el
descenso hasta el puente junto al molino. Realizaremos una parada
para contemplar el molino, el puente y la fuerza de las aguas.
Ahora
continuamos de vuelta por pista, por la otra orilla del Zinqueta.
Y
en poco mas de una hora, hemos tenido un paseo muy agradable, donde
en nuestra amena charla, casi hemos arreglado el mundo.
Como
complemento, una vez en nuestros vehículos, nos acercamos a la
población de Gistaín, y la visitamos.
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