LA MUELA DE MONTALBÁN

Entonces se trasladó mí­o Cid, al puerto de Alucant,
desde allí­ atacó mí­o Cid a Huesa y a Montalbán,
en aquella correrí­a diez dí­as tuvieron que emplear.

Las mejores caminatas son las que abandonan la pista, el camino forestal y se adentran en el bosque, entre paredes de rocas, por estrechas sendas serpenteantes. Esta ruta, es un buen ejemplo de ello.

Vamos a la localidad de Montalbán, en la comarca de las Cuencas mineras. El comienzo de la ruta esta junto a la orilla del rio Martín, y estacionaremos el vehículo siguiendo las indicaciones del tanatorio del municipio o centro de conservación. Ojo, son dos edificios distintos. :-)

Acercándonos a la orilla, encontraremos la primera señalización de Fuente de Valdemiguel- ruta de la Muela. Caminaremos hasta encontrarnos un puentecito de madera que cruza el rio, obra de ingeniería elaborada donde las haya. Continuamos por el camino junto al cauce, que esta muy bien señalizado, sobre todo hasta la fuente. Haremos un primer cruce a la izquierdo, en el siguiente a la derecha y otra vez a la derecha. Y después de este baile, ascenderemos por un pinar, pasando junto a un abrevadero.

 

 

 

Encontraremos la fuente de Valdemiguel, bonito rincón, donde podernos refrescarnos y hacer un alto para admirar el lugar. Empezamos el ascenso, progresivo, y en zigzag entre el bosque y la siguiente parada sera en el mirador Geológico.

 

 

 

Mi impresión es que la mayoría del desnivel de esta ruta se realiza en este tramo, pero es llevadero debido a su trazado.

Hallaremos otro abrevadero, el de la fuente de los Vaciones, donde tomaremos el desvío para visitar la cueva del Greñicas y el mirador de Montalban. Unos 10 minutos, que merece la pena emplear, tanto por la curiosidad de la cueva, como por las vistas que ofrece el mirador.

HISTORIA O LEYENDA ?

Volveremos hasta la fuente de los Vaciones, y continuaremos para alcanzar el alto de la Muela. Al salir del pinar, hay que estar atentos para encontrar una pequeña, minúscula, casi inapreciable senda que nos llevara hasta la cima, hasta el vértice geodésico del alto de la Muela. Y buscando los mojones que algún voluntarioso ha colocado, cresteando, llegaremos hasta el ultimo mirador, el mirador del Morrón Royo.

Impresionados por el entorno, y hambrientos, decidimos hacer aquí la parada para comer, y al abrigo de las rocas, damos cuentas a las viandas.

Ya sin prisa, tras una buena sobremesa, retomamos el camino de vuelta, para, ahora ya en ligero descenso, volver hasta Montalban.

Aquí, como no, refrescarnos y paseo por la localidad.

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