Terminamos
el año con pico y con pico comenzamos uno nuevo. Tras las comilonas
de estos pasados días, como diría una amiga del grupo, optamos por
esta ruta para “quemar todos los excesos de las navidades y
conectar con la naturaleza”.
En
el mismo entorno de Arguis, realizamos la ascensión al pico del
Águila (1620m). Aparcamos junto al embalse y en el inicio del
bosque , junto a la rotonda, encontraremos la señalización de
comienzo de la ruta.
El
día amanece, tras salir de Zaragoza, con grados en negativo en el
termómetro, y momentos antes de abandonar el vehículo, -4 grados
nos dan la bienvenida al embalse de Arguis. Pero poco a poco, las
temperaturas van subiendo, el cielo, despejado en su totalidad, deja
que los rayos del sol nos vayan calentando, y el resultado es un día
esplendido.
Comenzamos
el caminar, dentro del bosque, con vistas del embalse a nuestra
derecha. A nuestro frente comienzan a asomar las antenas del pico.
Es una subida muy llevadera, ya que va tomando altitud muy
progresivamente.
Llegamos
a un tramo de pedregal, donde solo, en un pequeño trozo, el camino a
desaparecido, pero han habilitado una cadena, para seguridad.
Volvemos
a adentrarnos en el bosque, hasta llegar al collado que nos conducirá
al pico del Águila, donde contemplando las vistas que en las
diversas vertientes nos ofrecen, tomaremos un pequeño refrigerio
para recuperar fuerzas.
Como
en realidad la subida nos ha sabido a poco, realizaremos un paseo a
dos “piquillos” cercanos, señalizados como Mesón nuevo.
Volvemos
al collado, y retomamos el mismo camino de vuelta. En un resguardo al
sol, hacemos la parada de comer, tomando ademas de alimentos, la
vitamina D, del astro rey.
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